miércoles, 7 de julio de 2010

ALGUNOS LIBROS QUE HICIERON ACTO DE PRESENCIA EN EL V ENCUENTRO DE MUJERES POETAS EN HUEJUQUILLA Y I ENCUENTRO DE MUJERES POETAS DEL NORESTE

Por Carmen Amato

Estuve en la ciudad de Jiménez del 10 al 12 de Junio de 2010, en el V Encuentro de Mujeres Poetas en Huejuquilla, y el Primer Encuentro de Mujeres poetas del Noroeste, evento este último que logró conjuntar la participación de poetas de Tamaulipas, Durango, Nuevo León, Coahuila y por supuesto de Chihuahua, estado anfitrión, además de poetas de otros estados de la república, como San Luis Potosí y el Distrito Federal.

Fue muy interesante y un lujo contar con la presencia de talentosas mujeres que compartieron su quehacer poético con las participantes y los concurrentes a este encuentro. Un intercambio de excelente poesía inédita y poesía publicada fluyó a lo largo de estos tres días. Los poemas llegaron a la comunidad y a un público atento por varios frentes: lectura directa en espacios oficiales: escuelas, asilos, reclusorios, centros de maestros. A través de los medios masivos de comunicación como fue el radio, la televisión, el cable. Por medio de Talleres para estudiantes de secundaria que se llevaron a cabo en la Asociación Ganadera, sede oficial del encuentro. Contacto directo con el público en las calles y la plaza principal a través de los Tendederos poéticos, el micrófono abierto y la Lluvia de poemas impresos dejados caer desde una avioneta que sobrevoló la ciudad varias ocasiones con este fin, llenando la ciudad de Jiménez de poesía. La palabra tomó la palabra en esta Antigua Hacienda de Huejuquilla y la magia cumplió su cometido, llenar el corazón del público y poetas de un gozo renovador y lúdico, y mostrar que hay otra manera de enfocar la realidad a través de la poesía.

Una gran variedad de libros de las poetas participantes fueron puestos en exhibición y venta en este Encuentro, deseo referirme de una manera breve a aquéllos que llegaron a mis manos y tuve el privilegio de revisar, libros que me impactaron gratamente por el placer estético que lograron despertar en mí.



Por supuesto el primer libro que logró hacerme abrir la boca por su hermosa edición, luego el corazón y la mente fue el de la maestra Dolores Castro, Río memorioso. Obra reunida, editado por la Universidad Autónoma de Aguascalientes (2009). Este libro reúne la obra de esta importante poeta mexicana perteneciente a la generación de los poetas que están escribiendo desde la década de los cincuenta, un libro completo que reúne poesía, novela y ensayo. Libro lleno de luz y de sonidos que recrean el murmullo de un río caudaloso en el que la memoria no calla nada, sino al contrario todo lo canta y lo ilumina en la fluidez del instante que el lector hace vigente.



Los poemas inéditos de Yamile Paz Paredes: Como negras erratas del deseo, son poemas sumamente cuidados y con una calidad extraordinaria, cuyos temas algunos literarios, otros psicológicos, llevan al lector a una experiencia contundente, la palabra dice exactamente lo que quiere expresar, y el lector se queda de tajo iluminado. La ironía como recurso recurrente y la manera tan llena de energía e intención por parte de la poeta hace una experiencia mágica y compartida su lectura.




Dos libros de Estela Guerra Garnica me han causado una grata impresión y un placer su lectura. Uno de poesía, Líneas en el Viento (Arteria, 2010), otro de narrativa, Niebla en el Camino (UNAM, 2008). Los poemas me parecen fluidos e hilvanados como corrientes de aire, temas comunes de la vida cotidiana dichos de una manera sumamente personalizada, asimilada, reflexionada, acompañados de las viñetas hechas a la medida de Jesús Brillanti. Niebla en el viento, cuentos y relatos urbanos, también se leen con una sabrosa fluidez, incluso podría leerse todo el libro de una sola sentada, a esto contribuye el saber contar de la autora, como quien conversa, como quien dice cosas cotidianas, como quien se da cuenta que en la charla ya se le fue la tarde.



Lo mismo ocurre con los Delincuentos. Historias del Narcotráfico (Solar Colección, 2009), de Arminé Arjona. Poeta y narradora que siempre tiene la palabra a flor de labios y de dedos, como un arma, como una herramienta. Arminé no dispara en vano, cada palabra que acierta a decir o escribir es una bala expansiva, ya no hay marcha atrás, ya lo dijo y por lo tanto tendrá su consecuencia en el lector o en el oyente. Delincuentos es la denuncia de una voz femenina que nunca se ha cansado de decir lo que pasa en su ciudad, nunca ha dejado de poner el dedo en la llaga, nunca ha dejado de gritar que en Ciudad Juárez suceden cosas inadmisibles que el mundo no puede ignorar ni sus habitantes seguir tolerando. Con una palabra ágil e inteligente, entrama historias, aforismos, versos, que iluminan situaciones con poquísimas palabras, y después de leerla, la consciencia es irreversible.



Si algo es cierto en este Encuentro de Poetas llevado a cabo en Ciudad Jiménez, es que las voces que resonaron de una manera alta y luminosa fue precisamente la de las poetas tamaulipecas. Marisol Vera con su libro Tiempo sin orillas (Voces de Barlovento, 2009), lleva al lector por una experiencia poética a través del camino del cuerpo. El cuerpo como el espacio de la revelación, rito de pasaje entre la inocencia y el conocimiento, reconocimiento de la infancia como pasadizo para ascender a la madurez de la voz poética.


El libro de Cinthia Rodríguez Leija, no se queda atrás en este acorde de voces poéticas tamaulipecas, ganadora de varios premios en los estados Campeche, San Luis y Tamaulipas. Su libro Reinos de Ciudad (Instituto Tamaulipeco para la Cultura, 2003), presenta una voz madura enfocada en el nosotros. Voz que se desplaza desde el ser íntegro y se hace una con la ciudad, a la cual explora, conoce y reconoce, calle por calle, como si leyera un poema verso por verso en cada uno de estos espacios citadinos. Su voz fresca, fluida, parece provenir de una minuciosa observación y una búsqueda de esos reinos urbanos.



Lorena Girón Orozco, nos ofrece dos libros de formato pequeño, tipo plaquete. Lo que llamó mi atención primeramente fueron los títulos utilizados: Cuando el divorcio se volvió poesía (Grupo Editorial Jano, 2007) y Pensé que eran solamente palabras (Grupo Editorial Jano 2007). De entrada no parecen libros de poesía tradicionales, ya que poetizan un proceso psicológico y lo presentan con juegos tipográficos resaltando ciertos conceptos o palabras. Agradezco a Lorena que me haya obsequiado sus dos libros, pues creo que más allá del acierto poético que pudieran tener o no, proponen ser compartidos con un grupo más amplio de lectores que el restringido solo a poetas. Es una lúcida búsqueda del yo y en ese yo, la búsqueda de la palabra misma, esa que se esconde, se confunde, se revierte, esa que cuando aparece nos ilumina y justifica al mismo tiempo el dolor de la búsqueda.



Por primera vez me he aproximado al misterio y a la benigna protección de los gatos, por eso agradezco muchísimo el poemario Raíz de gata negra ( Editorial HomoScriptum, 2008), de Lucía Yépez, poeta neoleonense, porque a través de él me he adentrado a lo que esa voz poética nos transmite con tanta sensualidad y conocimiento. A través de estos poemas trato de entender a la gata que llevamos dentro, incluso ver si con los poemas de Yépez, se desinhibe.


Dentro de esta gama de interesantes temas y tonos de los libros recibidos de las compañeras durante este V Encuentro de Mujeres Poetas en Huejuquilla, y el Primer Encuentro de Mujeres Poetas de Noreste, el libro de Leticia Salazar Castañeda, poeta duranguense: Pájaro sin parvada ni horizonte (Instituto Cultural del Estado de Durango 2005), es un libro que particularmente me ha conmovido. Leticia me regaló amablemente su libro, cuyo formato más grande que el tamaño normal, en tonos gris y azul llamó mi atención, es un libro de colores casi neutros, quizá para no robarle la luz a las palabras del interior. Esta mañana me he puesto a leerlo y me ha sacudido desde el inicio esa manera de escribir tan profusa. Es como un río que mana y mana y no tiene fin, y que va arrastrando al lector por diferentes y múltiples vertientes. Leticia Salazar es la palabra hecha mujer que se sabe pájaro y no hay cielo capaz de contenerla. Me he sentido arrastrada por sus corrientes de palabras, por su manera de decir, por la contundencia para hablarse con Dios y con la muerte y con la gente común de su infancia y con los conocidos y los no conocidos. Gracias Leticia por entregarme este poemario que me abre grietas y cavernas profundas como las que has encontrado, no sé si logre seguirte todo el viaje, pero de que este libro me ha atrapado, me ha atrapado.


No podría concluir esta breve reseña sin comentar el audiolibro de Lilly Blake, Caracola solar ( Instituto Chihuahuense de la Cultura, 2009), una selección digital de su libro impreso Espejo de Fuego. Escuchar este disco compacto es asistir a una experiencia, ahora si como dice Enrique Iglesias, casi religiosa: la voz pausada llena de pequeñas revelaciones de la propia autora, acompañada por una acústica bien seleccionada dejan en el oyente una resonancia mística-filosófica, de intuición interior. Cada poema dicho en voz de la poeta es una perla para ser acariciada por la mente y el oído. No pretendo extenderme en este comentario, pero si deseo decir, que Lilly Blake, con su poemínimo llamado “Intuición” da un giro de tuerca a la máxima que ha sido pilar de la filosofía clásica occidental, aquélla en la que Sócrates afirma contundente: “Yo sólo sé que no sé nada”. Han tenido que transcurrir miles de años en la historia de la humanidad para que una mujer mexicana, poeta, específicamente chihuahuense, venga a contraponer su lucidez a este pensamiento milenario y afirmar con sencillez: “Yo sólo sé, qué sé más de lo que sé”.

Tampoco puedo dejar de mencionar el extraordinario libro de Lety Luna, conocida y excelente poeta de la ciudad de México, Los días heridos, aunque no lo tengo en mis manos, lo tengo en mi mente y en la experiencia impresa en mis sentidos al ser leídos por su autora. Un libro de poemas dolorosos y de denuncia de un país que se deshace entre las manos. Poemas basados en hechos reales y sangrientos, poemas dichos con voz fuerte y enérgica, con palabras crudas y expansivas, poemas que no poetizan la realidad sino que la nombran y la exhiben. Los días heridos, son poemas para mantener abierta la herida y no dejar que sane nunca la memoria de lo que agrede y ofende en un país sin ley.

viernes, 25 de junio de 2010

"Al Filo del Poema" 2010

Les comparto esta reseña del Encuentro de Mujeres Poetas en Cd. Jiménez, Chih., realizado del 10 al 12 de junio de 2010.



Encuentro de Mujeres Poetas
en Santa María de las Caldas del Valle de Huejuquilla.
Junio de 2010


Margarita Muñoz


Siempre he dicho que no hay nada más hermoso que una feria de las flores, luego he dicho que sí, que si puede haber algo más bello y es una feria de libros. Más sin duda puede haber algo aún más bello porque conjunta ambas cosas y es un encuentro de mujeres poetas.

Recién regresamos de Santa María de las Caldas del Valle de Huejuquilla o Guajoqilla (Cd. Jiménez, Chih.), en donde se celebró el Quinto Encuentro de Mujeres Poetas en Huejoquilla “Al Filo del Poema” y el Primer Encuentro Regional de Mujeres Poetas del Noreste. Hemos presenciado una reunión en la que participaron casi 40 mujeres de los estados de Chihuahua, Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila y Durango, Estado de México y México, D. F. Voces diferentes, generaciones diferentes, pero todas con el mismo espíritu: la mujer del norte de México que alza la voz y dice lo que tiene que decir.


Mujeres Poetas en “El Paraíso”(Foto 1)
El Encuentro Internacional de Poetas, es el resultado del esfuerzo de dos mujeres extraordinarias a quien debo felicitar, por su espíritu invencible y su entereza indoblegable.: Edna Ojeda y Olga Varela. Felicitar al tenaz equipo de organizadores sin cuyo concurso este encuentro no sería posible; Ramón Quintana Presidente del Grupo Cultural La Casona que siempre ha convocado al encuentro, Ernesto Samaniego, presidente del Grupo Entre Amigos, Lety Perea, Esperanza Uribe, Oti González, Julia Rosa Meléndez, Norma Medina, María Elena Salgueiro, Leopoldina “Polita” Barrios de Ojeda (mamá de Edna y de todas nosotras por adopción), José Núñez, Javier Martínez, Elena Emma Fernández, Paty Villarreal, Tony Granados, Cathy Bujaidar, Verónica Medina, Cipriano Silva Muñoz. Maria de la Luz Terrazas, Alicia Orozco, Edith Villanueva, Eva Venzor, Lilia Núñez, Margarita Ortiz, Conchita Gascón, José Luis y Max Díaz, Silene y Guillermo Abes, Paty e Irene Quintana, Blanquita Martínez y Toño Granados. Los medios de Comunicación dieron ejemplo del compromiso social con la comunidad: la estación de radio “La Campera”, (siempre apoyando la cultura), Halcón Estereo, (solidario), y las puertas generosas de T.V. Cable hicieron posible difundir la palabra escrita.

Dolores Castro y Yamilé Paz Paredes(Foto 2)
En esta edición se contó con la participación del Instituto Chihuahuense de la Cultura, por medio del Lic. Luis Iván Carlos, Jefe del Área de Desarrollo Artístico y la escritora Renée Acosta, Coordinadora del Área de Literatura de la mencionada institución, del Fondo Regional para la Cultura y las Artes del Noreste, (FORCA) y de Tres Siglos Tres Fiestas por medio de su representante Lic. Santiago de las Casas. Intervención valiosa que permitió la asistencia de escritoras de los estados ya mencionados, además de la participación importantísima de Dolores Castro, Yamilé Paz Paredes, Leticia Luna, Minerva Salado, María Elena Solórzano, Carmen Amato, Estela Guerra, grupo de poetas, que dejaron por unos días sus quehaceres para debatir, compartir y participar en un ejercicio enriquecedor, sobre lo que es y no es la poesía contemporánea en el norte de nuestro país.
Los encuentros de poetas siempre tienen magia, y hubo un momento, --tal vez uno de los más emocionantes,-- que nos hizo vivir Yamilé Paz Paredes al encender fuego de la poesía y la presencia de la Mtra. Dolores Castro abriendo la agenda de trabajos en los que invariablemente se entra en una aventura vertiginosa llena de momentos inolvidables y felices: lecturas en las escuelas, en los parques, en el centro de rehabilitación, en salas y auditorios públicos. Momentos llenos de emoción con el tendedero poético y la lluvia de poesía, que este año nos sorprendió con un reguero de poemas que caían del cielo y que inundaron toda la ciudad, lanzados por un pequeño avión y con la solidaridad del Chato Abes, lo que nos llenó de asombro y de alegría.



Lluvia de Poesía (Foto 3)

Las lecturas de poesía de Dolores Castro, Yamilé Paz Paredes, Leticia Luna fueron como un chubasco de agua fresca. Escucharlas a ellas y a todas las demás en las distintas mesas de lectura, me hicieron reflexionar en un proceso intimista que se crea cuando escuchamos y leemos la poesía escrita por mujeres. Fuera de paradigmas, de esquemas y moldes rígidos, este proceso nos lleva a compartir con gozo el alma femenina. En este acto solidario, compartido que son los encuentros de mujeres poetas, no hay diferencias, se borran las fronteras, caen las barreras de las costumbres, de la religión, de la cultura; se funden para dar cabida a la aspiración de un mundo mejor, de un bien mayor.


Leti Luna (Foto 4)
La escritura es un oficio de paciencia, de introspección; un oficio silencioso y solitario. Es mantener nuestras raíces, nutrir los recuerdos, inventar la realidad y muchas veces dar voz a quienes no la tienen. Una razón para realizar este Encuentro de Mujeres poetas, es ese paso siguiente al ejercicio personal que es la escritura. Una vez que hemos experimentado el placer, la emoción de haber sido capaces de escribir un poema, nos aventuramos a tender un puente para llegar al corazón de los otros y deseamos que de alguna manera podamos cambiar por un instante el mundo para hacerlo más habitable a través de la palabra.

Lectura en el Centro de Maestros (Foto 5)

Voces tan disímiles, como pueden ser los lugares y las culturas de donde son originarias las poetas: Chihuahua, Coahuila, Durango, Tamaulipas, Nuevo León, Estado de México, México, D.F., Ciudad Juárez, H. del Parral, Delicias, Matamoros, ciudades y pueblos del Estado de Chihuahua, todas unidas por un denominador común, el deseo de conservar algo que compartimos y nos pertenece: nuestra lengua, nuestro oficio, nuestros afectos…y luego compartir la presencia solidaria de la comunidad, la gente que con su cálida respuesta retroalimenta este encuentro. La caja de resonancia para nuestro quehacer son los hombres, las mujeres, los jóvenes, los niños, que escuchan y nos brindan su sonrisa, su atención; que se llevan un poema del tendedero poético, nos piden una firma, hablan con nosotras y comparten el gozo de la poesía.

Espectadoras del Tendedero Poético(Foto 6)

Como dice el poeta argentino Juan L. Ortiz: “La poesía es la realización del estado de infancia que debe permanecer a través de todas las edades del hombre. Llamándose estado de infancia a esa frescura, sensibilidad, disponibilidad, a esa apertura hacia todo lo que aparece; hacia todo lo que parece viejo y es nuevo. Hasta la materia misma de la realidad interior de las cosas. La poesía es fundamentalmente descubrimiento”; esa es la sensación que nos trasmite y nos invita a mirar el mundo de otra manera. Vivimos este encuentro con estos ingredientes y nos hemos ido felices deseando que el reencuentro sea muy pronto y que podamos de nuevo compartir este ritual mágico que es la poesía y convertirla en la fuerza que regala vida a las poetas. Me gusta pensar que esa magia sirva como elemento refractario contra todos los males que nos acechan y que la palabra de estas mujeres, sirva para exorcizarlos con su poesía


Cd. Jiménez, Chih., Junio de 2010

miércoles, 23 de junio de 2010

domingo, 7 de marzo de 2010

Entrega de reconocimientos


Tengo el honor de contar con la amistad de una mujer que ha sido reconocida por su trabajo en su propia tierra, y además, de contar con su amistad. Un abrazo y felicitación cariñosa para mi querida Carmen Amato, ángel y poeta. En la foto, tiene la blusa azul.


El pleno del Congreso del Estado aprobó otorgar el Reconocimiento “Chihuahuense Destacada 2010”, en sus distintas áreas, a las siguientes ciudadanas:

• El reconocimiento “Aurora Reyes“, otorgado a la C. Marina Salazar Amaro, por haberse distinguido en las disciplinas artísticas, especialmente como cantante soprano y saxofonista. (residencia Chihuahua, Chih.)

• El reconocimiento “Guadalupe Sánchez de Araiza”, otorgado a la mujer chihuahuense María del Socorro Chacón Chávez, ya que se ha distinguido en el campo de trabajo social y de obras asistenciales. (con residencia Cuauhtémoc, Chih.)

• El reconocimiento “María Esther Orozco Orozco”, será para la C. María Teresa Alarcón Herrera, chihuahuense que se ha destacado en el campo científico. (residencia Chihuahua, Chih.)

• El reconocimiento “María Edmeé Álvarez”, se otorgará a la C. Carmen Amato Tejeda,mujer chihuahuense que ha sobresalido en la literatura. (con residencia Cd. Juárez, Chih.)

• El reconocimiento “Bertha Chiu Núñez”, se entregará a la C. Ruth del Carmen Grajeda González, mujer chihuahuense que cuenta con una trayectoria destacada en la disciplina deportiva. (residencia Chihuahua, Chih.)

Los reconocimientos se entregarán este lunes 08 de marzo en el Recinto Oficial del Poder Legislativo Estatal en punto de las 10:00 horas.
Fecha:2010-03-02

viernes, 26 de febrero de 2010

Monólogo de una mujer madura

por Liz Durand Goytia

I

Será el sereno, pero para mí que sigo teniendo treinta años. Si no me fijo mucho en el espejo -y no me pongo los anteojos- puedo verme de treinta. La vestimenta ayuda pero lo más importante es no dejar que me avasalle la impertinencia de las canas. Caminar ágilmente y seguir usando tacones aunque me estén matando los juanetes. Recordar que se debe sonreir con amplitud para disimular la arruga y causar impresión de dinamismo. Ese es mi reglamento para comenzar el día.
Y en el desayuno no olvidar la avena para bajar el colesterol ni la cucharada de miel “para la lozanía de la piel”.
Muchos de mis días los puedo transitar así, como si no fuera yo cincuentona. Y no es que me pese ni mucho menos me avergüence la edad. Es que para el resto de la humanidad resulté ser un vejestorio desde los treinta y ocho, que fue cuando me quedé sin trabajo. Simplemente, por más experiencia y buena presentación, al llegar a los datos personales y ver mi edad, me salían con que “nosotros la llamamos” y nada. Por eso me dijo Estela que pusiera una edad falsa. “Al cabo te ves más joven”, me dijo. Pero no quise hacer trampa y claro, desde entonces no tengo trabajo fijo.
Pero como quiera tuve que entrar en el juego de las simulaciones para que la gente no sepa mi edad y deje yo de andarme arriesgando a pasar por invisible debido a mis años. Tengo que seguir sintiéndome hermosa y sexy y ágil para seguir siendo yo, por fuera y por dentro. O al menos para recordar cómo era cuando todavía no era una mujer, digamos, “madura”.
Que por cierto no es que pesen, los años, pero qué feo se siente tener la clásica irritación a medio día por la resequedad en los ojos. Y para qué hablar de resequedades más dolorosas... Carmen dice que lo más patético que le ha pasado fue encontrar canas en donde te platiqué. Yo digo que en estos tiempos si quieres te rapas y ni quién sepa, así que para mí no sería “la decadencia” como dice ella en tono tan fatal. Para mí es más incómodo no distinguir los precios de las cosas en el súper cuando no llevo los bifocales que no me acostumbro a usar.
Pero tampoco me doy atole con el dedo y claramente veo que cuando tengo ganas de llorar porque veo en la tele un perro con orejas largas y ojos tristes, es la jugarreta de las hormonas lo que lo provoca. O cuando voy a la compra y me desesespero hasta la rabia porque la cajera trabaja a treinta revoluciones por minuto según yo.
Y si al arreglarme las uñas las encuentro quebradizas y me veo la piel como de iguana, estoy a punto de colocarme con resignación el tan llevado y traído letrerito de menopáusica que me da tanta tirria desde la primera vez que oí la palabrota.
Es que además cómo fastidia que siempre nos anden colgando etiquetas “ama de casa” “madre abnegada” “sex simbol” “femme fatale” etcétera, cuando somos solamente mujeres. Y eso de “solamente” sobra, porque es bastante con ser mujeres. Porque a poco no, todo el mundo sabe que viejas viejas pero seguimos siendo m u l t i f u n c i o n a l e s. Sí, claro, también multiorgásmicas, nomás faltaba que también eso se atrofiara. Lo único malo es que si de por sí es una lenta para arrancar motores, con la menopausia es como si necesitáramos anticongelante.
Total, servimos para todo y para lo que se ofrezca. Hasta para consolarnos solas cuando de veras amanecemos adoloridas sintiendo que no es justo tener la sensación de que somos de treita años pero el cuerpo no se da por enterado y nos tiene tiradas con un cansancio olímpico que nos hace sentir que los hijos o el marido o el jefe o todos juntos son los peores esclavistas que ha conocido la tierra, rufianes egoístas que se sirven de nosotras para tener una vida mucho más plena y maravillosa que la nuestra, sin los escalofriantes cambios hormonales que nos hacen tan temibles.
II

Tengo difícil el día cuando amanezco con problemas para entender al mundo y a mis semejantes, aún los más próximos. Tengo dificultad para saber por qué me siento así, de malas, frustrada, deprimida, triste, con los ojos hechos agua y la garganta de nudo. Tengo dificultad para lavarme el coco diciéndome que son hormonas, que es el cambio, que llegó la feliz etapa de la menopausia, que son normales mis dolores de huesos, que así les punzan las articulaciones a todas las mujeres aunque las veamos sonrientes y luciendo espléndidos maquillajes y sonrisas...
Me cuesta trabajo tener calma cuando las cosas son distintas de como las pienso o simplemente son, aunque no sean diferentes; es arduo y trabajoso encontrar un sitio en el mundo cuando está una cargando un saco de huesos un tanto roídos, un equipaje de dolores y penurias y por más que rasca una el monedero no encuentra esas monedas en las que se grabaron la sonrisas, las frases ahora ausentes de "soy la más feliz", los momentos en que una se sintió tan adorada y a la vez enamorada...
Difícil ver o sentir que tu pareja está tan lejos, tan ajena a todo eso que te pasa, tranquilo mientras en tu cabeza se asientan telarañas o molesto cuando empiezas a tratar de removerlas porque lo involucras en una fantasía llena de recriminaciones y amarguras...
Difícil atinar a deshacer la bola dolorosa entre garganta y pecho, ese trago que se atora y lastima y nunca deja de crecer.
¿Una pastilla? Increíble pero maravilloso. Con eso veré claro, la angustia pasará a ser cosa de risa, mis problemas existenciales serán sólo fantasmas, el mundo volverá a ser colorido, mi marido casi un galán cinematográfico y mi vida color de rosa sin el fastidio del hígado atravesado por los malos humores ni esos aspavientos en el corazón que parecen presagiar el fin del mundo-de mi mundo-.
Voy por ella, por la pastilla que nos hace felices y adorables, que nos hace despertar con la sonrisa previamente marcada, durante el sueño igualmente feliz, sereno, y sobre todo nos hace recuperar la sensación de ser una persona amada con su respectivo y respetable lugar en el mundo, una persona asentada y madura que no causa problemas ni molestias, que vive conforme con su vida y sobre todo, que está convencida de ser feliz. La pareja ideal, sencillamente.






III

Edades

Mirando en el espejo mi reflejo más mudo
contemplo líneas en mi rostro:
tan discretas que yo las ignoraba;
tan marcadas que tú no las olvidas.

En el exilio que me impuso tu mirada
un aire nuevo me renace los ojos
y en otra brisa se mecen mis cabellos.

No son los años lo que cargo a cuestas:
porque los besos dejan rastro,
porque las alegrías marcan los párpados,
porque el amor surca los rostros,
tengo discretas líneas que ignoraba
y que luzco ahora como alhajas
para que nadie ignore que es la vida,
no son los años lo que cargo a cuestas.

viernes, 22 de enero de 2010

Gallinas ciegas

Liz Durand


I
En dónde la canción que nos meciera, madre,
dónde tu pecho hinchado de calostro,
tu amor, tu abrazo ¿dónde?
En la orfandad brilló con trueno
la voz del que despoja.
No pudimos tocarte,
fuiste una estrella al sur siempre perdido
ni pudimos marchar bajo tu sombra
a enfrentar la vida que nos diste.

De la mano de Dios anduvimos el mundo,
y los caminos fueron muros o cadalsos.
Aquella luz al final de los túneles
era tu nombre cruzado de ironía
siempre cubierto con tu desAmparo.
Tú no tuviste la culpa por el fuego
que fatuo sólo nos dejó tinieblas.

Nunca devota, madre, fue tu tierra
que esparció sus semillas en el aire.
¿Por qué la angustia inútil en el sueño
si jamás me pronuncias ni me buscas,
ni revistes mis llagas con tu aliento
ni me guardas altares en tu seno?

Cada paso que dimos era búsqueda,
cada puerta cerrada tu palabra.
¡En dónde, madre los corazones abnegados,
el horno tibio de la casa,
la mano que descose pesadillas?
¿Dónde la voz que nunca está cansada,
en dónde el húmedo pañuelo de tu llanto?


II
Gallinas ciegas en busca de tus alas
convocadas a la luz de la esperanza
vamos dando de tumbos calle abajo.
Nos revuelcan afuera remolinos,
nos dehollan la piel para sangrarnos.
Cada gota que damos y te busca
es esa voz que desde niños pía
con la amargosa certeza de no hallarte.

¿Eres feliz, callada y siempre ausente?
¿Pasan tus días suaves como rezos?
¿Tienes memoria, madre?
¿Cuándo abandonarás tu devoción por el olvido
y debajo de todas estas ramas
asumirás la tierra y las raíces?
¿Cuándo vendrá la flor que cicatrice.
cuándo abrirás las alas que nos guarden,
gallinas ciegas en busca de su grano?

Cuándo tendrás valor para aceptarnos,
despojos grises en busca de ser hijos
para tener abrigo entre tus plumas.
surcido el corazón y piando la alegría.


III
Tengo ya media vida consumida:
estos huesos sin calcio,
muchas lunas sin verte,
pero quiero acabar con la tortura
y te perdono madre,
por no querer saber sobre tus hijos.
Sé que no decidiste tu destino,
que tú no eres la culpa,
que un mal augurio nos partió la vida
en todos estos pedazos que no ves.

Sigue tu andanza, madre,
enhebra hilo tras hilo
en estas horas en que no respondes.
Teje los imposibles nidos en manteles
que nunca vestirán a nuestra mesa.
Sigue pensando en los ingratos hijos
que no te acercan flores.
Sigue tejiendo sueños, madre:
deja que escurra lenta la amargura
que hace veneno en todos nuestros días.

lunes, 10 de agosto de 2009

Camen Holguín desde España

Familia, amigos, ya estamos llegando al final del viaje, pero por lo pronto déjenme contarles un poco de la visita al País Vasco:

Salimos de Madrid el 29 de julio, a las ocho de la mañana en el tren, hay que destacar esto porque tuvimos que tomar este tren porque era muy barato en comparación con todas las demás salidas del día, mientras éstas costaban desde un mínimo de 60 euros, nuestra salida fue de 28...llegamos a Bilbao a la una de la tarde y de ahí tomamos el metro hacia Labarrasterra, una especie de colonia de Sopelana, el pueblo de nuestra anfitriona allá: Silvia Delgado, una amiga poeta. Silvia tiene una Casa rural, que es algo así como un hotelito pequeño donde se ofrece cama y desayuno, un "Bed and Breakfst" en EEUU. Como es pleno verano y las pyas de Labarrasterra son muy buenas para el surf, Silvia tienia la casa llena, pero aún así nos recibió y nos hizo un hueco generoso.
La primera tarde caminamos por la playa, había gente, pero no demasiada, el paisaje era lindo mostrando el mar en su inmensidad azul viéndolo nosotros desde el marco de un conjunto de rocas talladas de maneras caprichosas por la naturaleza y el clima.
El día 30 de julio por sugerencia de Silvia nos dimos a una caminata maravillosa de cuatro horas por la costa desde Labarrasterra hasta Getxo. Todo el recorrido puede hacerse por un camino adoquinado que hace más fácil el paseo y los paisajes son increíbles porque vas viendo el mar siempre desde diferentes ángulos, desde arriba, más a su altura, pero siempre cerca y lo vas oliendo y oyendo. hay bancas por todo el recorrido, así que puedes sentarte y descansar admirando aquel azul extendido ante tus ojos. Getxo como final de trayecto es porque ahí hay un puente: El Puente Vizcaya. Es el puente colgante más antiguo del mundo y sirve también para pasar gente de un lado a otro, de Getxo a Portugalete. Volvimos a Larrabasterra a eso de las siete de la tarde y Silvia ya estaba lista para llevarnos a un paseo, esta vez en coche, por el otro lado de la costa, así que pasamos otras tres horas de pueblito en pueblito blanco viendo más mar, ermitas enclavadas en cerros altísimos, puertos vivos llenos de gente disfrutando el sol de las ocho, nueve o diez de la noche...El día concluyó en un restaurante de Sopelana.
El 31 de julio no fue menos interesante que le anterior. Quizá recuerden que les platiqué que en Madrid, en el Museo de El Prado nos impresionó el cuadro de Picasso, el Guernica, bueno pues estando en El País Vasco hubiera sido imperdonable no visitar esta población que fue la que motivó el cuadro del pintor cuando fue bombardeada el 26 de abril de 1937 como un experimento de guerra. El 26 de abril era un lunes, día de mercado, así que la población civil fue impactada de forma tremenda y la ciudad ardió en llamas destruyéndose en un 70 %, luego se quiso tapar el crimen, pero las evidencias siempre fueron más fuertes. Hoy Gernika, como se escribe en euskera, la lengua vasca, es un pueblo de pie con un Museo de la Paz para no olvidar la tragedia, pero no para lamerse las heridas en vano sino para luchar por la paz. Guernica es un pueblo importante en El País Vasco porque es donde su gobernador juramenta y eso se ha venido haciendo desde tiempos muy antiguos, debajo de un roble. El roble más antiguo se enfermó un día y murió, pero antes habían logrado plantar hijitos de él, en uno de ellos se hacen ahora las juramentaciones. El cadáver del viejo roble está expuesto en un lugar especial construido para él. Después de Guernica, a donde también fuimos gracias a Silvia, llegamos al Puerto Viejo de Algorta, otra especie de colonia-pueblo cercana a Larrabasterra y en un callejón al que accedimos después de subir varias escaleras arribamos a un bar al aire libre donde tomamos y comimos algo.
El 1 de agosto Héctor y yo fuimos a Bilbao, queríamos conocer el Museo Guguenheim y un poco de la ciudad…Nos fuimos directo al museo, pero camino a él la calle por la que íbamos estaba cerrada por la policía, preguntamos qué pasaba y nos sorprendimos con la noticia de que había una amenaza de bomba, no en el museo sino en uno de los edificios cercanos…es extraña la sensación de peligro y de incredulidad que se siente…como los policías nos aconsejaron, nos fuimos rumbo al barrio antiguo “por la ría” (el río) con la idea de volver más tarde, a ver si ya todo había pasado. El centro antiguo es un conjunto de callecitas con edificaciones siempre de más de un piso llenando de sombra el conjunto, pero no habíamos caminado mucho cuando el hambre nos hizo entrar a un localito y estando en él comenzó la lluvia, una lluvia persistente que no abandonó Bilbao en toda la tarde. Como pudimos volvimos al área del museo y ya estaba libre el paso. El Guguenheim es un museo particular, con una arquitectura que no soy capaz de explicar…está hecho de titanio y cristal y no sé qué más, sus salas son inmensas porque sus exposiciones son monumentales la mayoría…la construcción del museo en sí misma es parte de las obras que hay que ver y admirar…hay obras afuera y adentro…no, no puedo describirlo, pero hay que verlo son duda.
Dejamos Bilbao el 2 de agosto y tomamos el autobús hacia San Sebastián…se los platico en otro correo, para que descansen los ojos después de este correote, así se leen el otro…los otros cuando quieran y puedan.
Abrazos
Carmen Julia